domingo, 25 de mayo de 2014

Risueña infancia

Niño que se esconde detrás de las páginas,
donde los sentimientos son compartidos,
donde el protagonista tiene su cómplice lector,
donde la vida no duele tanto.

Allí existen finales felices,
un personaje que sabe estrechar los brazos que le ofrecen,
inocencia en palabras, sentimientos puros, ideologías altruistas
y un némesis maligno de cartón
dispuesto a cambiar sus hábitos sólo a cambio de amor

Fuera de esto, un niño que no puede serlo,
temerario a simple vista, llora en su interior
donde su alma(corazón?) guarda las utopías leídas,
implentándolas, y sin mucho estupor
observando la  desesperanzadora reacción.